Sacando partido de SER divinamente HUMANO

El ser humano es PERFECTO tal como ES. Ya roza la perfección que se le ha negado a lo largo de los siglos y de una Historia humana poco creíble para aquellos que están verdaderamente despiertos y contentos de estar aquí y AHORA.
Tú no puedes perfeccionarte más de lo que ya lo hace Dios en cada inhalación que das y en cada exhalación que regalas a la existencia. Sólo puedes ser MÁS QUIÉN YA ERES. Y para ello, has de permitir la verdad en tu vida. Y la verdad, es que puedes relajarte y olvidarte de todas las voces que jamás te dieron aliento para ser quién eras AHORA, y escuchar la única voz que yace dentro de ti y en todas partes...la voz de la luz, la voz de la vida, la voz de la alegría, la voz que todo el mundo desea escuchar.
Conócete a ti mismo y despliega las alas que siempre tuviste bajo los brazos!!!

lunes, 2 de abril de 2012

A ti, oscuridad...

El sufrimiento de este mundo terminaría con sólo un dedo en tu ojo.
Pero hay quien piensa que el tiempo tiene su razón de ser. No lo tiene.
Veo y compruebo todos los días de esta mi vida, que te mantienes fiel a tu legado y a tu promesa...aquella que no ven los dormidos ni los cobardes.
Yo estoy alejada del coraje puesto que sé que contigo...siempre perderé. Y no me importa.
Cada movimiento que hago, que realizo, que dirijo, tú lo enturbias, lo acallas, lo empequeñeces, lo desgarras...y mientras yo no me preocupo por mi ego terrenal, los demás siguen haciendo cábalas de quién soy o porqué mi vida es como es.
Sólo la verdadera luz sabe que he dado más que mi vida. He dado la vida de otros a mi yo superior para que los ilumine en esta eterna sombra que a nadie le importa y que muy pocos ven.
No por falta de grandeza ni por falta de fuerza, sino por falta de dolor.
Nadie quiere sufrir lo inimaginable. Nadie quiere apostarlo todo, apostar todo aquello que la gran mayoría escondería por temor a perder lo que ama.
Y lo que sabes de verdad, es que nadie nos pertenece, en ningún estadío, en ningún momento, en ningún tiempo estable o lineal.
Sigues combatiendo contra mí, día y noche, noche y día, tiempo y no tiempo.
Temes mi inagotable luz dorada, azulada y brillante. Lo temes todo de mí porque deseo alcanzarte y no me dejas, no me dejas, oscuridad...y lo entiendo. Pero ya es la hora.
Es hora de que revels quién eres y porqué haces lo que haces. Es hora de que aceptes que la humanidad nunca fue tuya...y jamás lo será.
Sé cómo te introduces en los sueños, en las mentes y en los corazones débiles. Sé cómo deseas apoderarte de las almas puras y de las almas que luchan continuamente por la libertad del ser humano. Sé cómo, aberrante en tus formas y acciones invisibles, y que muy pocos podrían soportar ver, manipulas las mentes humanas y te haces con su fuerza vital, su voluntad, su disciplina. Veo cada día cómo intentas bloquear cada una de las puertas que abro con sólo mi presencia aquí en Tierra.
Veo cómo intentas por todos los medios y miedos bloquear todas y cada una de las ilusiones de esta alma llamada Elena, veo cómo intentas apoderarte de la estupidez intelectual y racional, veo cómo juegas en la mente y cómo destruyes las posibilidades de liberación del alma humana.
Te veo oscuridad, te veo claramente. Te veo con toda mi luz y con todo mi amor herido y cansado...
Veo cómo tratas de integrarte en la verdad y hacerla tuya...siendo mentira. Veo cómo todos los cuerdos que están encerrados libran batallas difíciles para liberarse de tu voz y de tus juegos.
Veo cómo la tecnología sutil y dañina hace que los seres humanos caigan rendidos ante vuestra grotesca y demonizada civilización involucionada, cómo vuestra tecnología hace que el ser humano sea un pelele absoluto.
Estoy sola en esta batalla. Desde hace tiempo, sola.
Pero es mejor así.
Habeis hecho trabajos duros para que creyamos que dios estaba fuera de nosotros y que deberíamos adorarle para tener sus alabanzas, sus aceptaciones, sus míseros regalos.
Mas bien, quedaros con todos los míos y repartirlos a aquellos que no desean enfrentarse jamás a la verdad. A la verdad que crea ejércitos de negrura para aquellos que se atrevan a no doblegarse ante los dioses que jamás lo fueron en Gaia. Y que jamás lo serán.
Mi espalda me duele una y otra vez...tratais de impedirme mi realeza, mi majestuosidad, mi dignidad como mujer humana rompiéndome y quebrandome las alas.
Mis alas están llenas de veneno, de oscuro latido, de canibalismo reptil, de miedo indescriptible pegado a las puntas de estas...
Callo lo que nadie sabe. Callo lo que jamás ningún humano podría imaginarse. Callo vuestro origen, vuestro Plan. Pero os habeis olvidado de quién soy.
No importa cuántas veces cerreis las puertas. Cerreis los grifos ni los soles internos. No importa...porque yo estaré aquí de pie para mis hermanos y hermanas de luz que firmaron conmigo un acuerdo, una promesa universal que nadie podrá arrebatarme jamás. Nisiquiera la profunda oscuridad a la que me dirijo.
No sabeis quién soy porque veis mis piernas cansadas y mi pequeña mente humana divagar y rezar para que alguien caiga del cielo y me rescate, pero ese alguien es todo mi reino. Mi reino DE LUZ INFINITO Y ETERNO.
Mi reino, que está bajo mis órdenes actuando como yo les digo desde otro cuerpo que no es el que veis con vuestros ojos míseros y pequeños.
Vuestro ojo es débil porque no puede ver a la diosa que hay detrás de cada ser vivo en la existencia. Y esa diosa soy yo.
Yo soy la diosa pleyadiana que se quitó su nombre y sus riquezas divinas para poder elevar el color de Gaia y elevarlo hasta lo que esta desea Y MERECE.
No podeis con la eternidad; jamás acabareis con lo eterno mientras viva aquí y allá. Mi cuerpo está en toda criatura, mi corazón es la morada de dios y la morada de dios yace en este corazón humano, capaz de entregarlo todo por...nada.
Esa es mi naturaleza. Mi verdadera naturaleza, la única, la indivisible, la incondicional, la auténtica.
Esta vida no tendría sentido sin todo el dolor que me habeis causado durante tanto tiempo, no lo entendería. Pero ahora lo entiendo. Ahora entiendo porqué habeis intentado destruirme una y otra vez, por todos los medios y vías físicas e invisibles.
Lo entiendo...eso me ha hecho ver quién SOY.
Mi presencia desde el día en que nací o aterricé en Gaia, fue perseguida una y otra vez. Fue tapada, nublada, dosificada, interrumpida, distorsionada, dañada, herida, atacada. Os veo bien. Tengo unos ojos perfectos y una alma perfecta para poder vencer a lo invencible.
Porque considerais que sois invencibles, intocables, rudos, bestias, vencedores sin piedad...y creeis mal, porque yo os desafío todos los días. No podeis vencerme porque no podeis comprar mi ego. Es blando y trabaja para mí.
JAMÁS PARA VOSOTROS.
Vine a destruir vuestro holograma, y aquí me teneis, de pie, dolorida y con un corazón universal que está dispuesto a renunciar a ser quién desea mi ego que sea, y no mi SER.
Oscuridad, tu mano será inservible cuando la quites de encima de mi cabeza, mis rodillas ensangrentadas habrán derrotado tu extremada fuerza alquitranada y mugrienta. No habrá servido para nada cuando te sientas desfallecer y recoger tus frutos, los frutos que tan buenamente sembraste.
Has intentado volverme loca de todas las formas posibles e imposibles. Has tratado de manejar mi mente a tu antojo. Has inventado juegos para que yo reciba los ataques más viles y más cobardes que cualquier ser humano despierto haya podido aceptar en este juego. Te los has currado como ningún otro jugador profesional de la liga luminosa podría aceptar jugar.
Has hecho lo que te ha dado la gana, cuando te ha dado la gana y sigues haciéndolo. No puedes parar tu ataque contra mí porque me temes, oscuridad, temes que un día de repente, en esta hermosa Tierra, todo se descubra y tú te quedes sin marionetas. Pero estaré aquí para y por ellos.
Te comeré viva, oscuridad. Soy el león de leones y me he reencarnado aquí las veces que deseaba vivir en este bendito y sagrado lugar universal.
Rujo como nadie lo ha hecho. Rujo como nadie lo hará nunca contra ti, oscuridad. RUJO, RUJO, RUJO y seguiré rugiendo hasta que te calles y des el cetro de poder que siempre le perteneció ... al ser humano.